Durante los meses de abril y mayo, gracias al voluntariado que promueve el apoyo a los proyectos de “Kyabe Avanza”, con los cuales nuestra entidad mantiene un compromiso de ayuda y cercanía, hemos celebrado dos eventos para dar a conocer las acciones que se están desarrollando en este lugar, situado en el sur de la República del Tchad.
En las primeras semanas de este 2022, un grupo de personas voluntarias trabajaron en el montaje y puesta en marcha de una instalación fotovoltaica que ya está dando servicio en el Instituto Politécnico de Secundaria y Formación Profesional de Kyabe. También se realizó el acondicionamiento y montaje de un aula de informática, que, gracias a una donación de equipos por parte de una institución, y su preparación con el voluntariado de la Fundación, ya está sirviendo para la formación del alumnado del Instituto.
Para recaudar fondos que pudieran financiar los gastos producidos para realizar estas instalaciones, el 22 de abril, gracias a la colaboración del alumnado y profesorado de la Escuela de Hostelería TOPI, realizamos por segundo año la venta de “lanzones solidarios”, consiguiendo distribuir más de doscientas unidades y Recaudando de1.795,00 €. En esta misma jornada, se realizó una charla para explicar todos los pormenores de este proyecto, compartir las dificultades para llevarlo a cabo y celebrar el éxito de su puesta en marcha y funcionamiento actual.
De igual manera, el pasado 23 de mayo, aprovechando la presencia en Zaragoza de Manolo Fortuny y Émile Agbede, responsables de los proyectos en Tchad, el grupo de voluntariado de la fundación organizó una jornada en la que se ofreció información de primera mano sobre la situación en la que se encuentran los proyectos, especialmente las necesidades de financiación para continuar con la ampliación del Instituto Politécnico. En esta jornada se recaudaron 308,00 € con el objetivo de completar el equipamiento del aula de informática.
Gracias a la voluntad de la comunidad que forma Fundación Picarral y el apoyo económico desinteresado de muchas personas anónimas, hemos sido capaces de dar respuesta a cuestiones, que, aunque puedan parecer pequeñas, cubren necesidades básicas para generar posibilidades de desarrollo real en lugares tan remotos y con accesos tan limitados a los bienes como este. Además, estas acciones hacen posible el reforzar la educación en valores tan importante en todos los programas de nuestra entidad.
